Monday, March 31, 2025

DAB Español, Martes 01 de Abril

Día 092, DAB Español, Martes 01 de Abril


Deuteronomio 18:1-20:20; Lucas 9:28-50; Salmos 73; Proverbios 12:10 (Traducción en lenguaje actual (TLA))











Deuteronomio 18-20

Traducción en lenguaje actual

Derechos de los sacerdotes


18 1-2 Moisés continuó diciendo:


«Todos los israelitas van a tener sus propias tierras, pero no así los sacerdotes; es decir, los de la tribu de Leví. Dios ha decidido cuidar de ellos y darles siempre todo lo que necesiten. Así que ellos tomarán sus alimentos de todas las ofrendas que los israelitas le presenten a Dios.


3 »Los sacerdotes podrán comer la carne de los toros y los corderos que se ofrezcan a Dios, pero de ellos sólo podrán comer la espaldilla, la quijada y una parte de la barriga. 4 Además, podrán tomar del trigo de las primeras cosechas, y del vino y del aceite, y también podrán utilizar la primera lana que se corte de las ovejas. 5 Nuestro Dios ha elegido a la tribu de Leví y a todos sus descendientes, para que se encarguen de los cultos en su honor.


6 »Si algún sacerdote siente el deseo de ir al Santuario, y abandona su propia ciudad, no se lo impidan. 7 Al contrario, ayúdenlo a llegar y a cumplir con su trabajo, como sus otros compañeros que ya trabajan en el Santuario. 8 Ese sacerdote tendrá derecho a recibir la misma cantidad de alimentos que los otros sacerdotes, y podrá también vender sus pertenencias y disfrutar del dinero de la venta».

Advertencia contra las malas costumbres


9-14 Moisés continuó diciéndoles:


«Cuando entren al territorio que Dios va a darles, se encontrarán con que la gente que allí vive, tiene costumbres terribles, que no agradan a Dios. Por ejemplo, esa gente entrega a sus hijos para quemarlos en honor de sus dioses, practica la brujería y la hechicería, y cree que puede adivinar el futuro. Además de sus brujerías, consultan a los espíritus de los muertos para pedirles consejo. Pero ustedes deben obedecer a nuestro Dios en todo, y tener cuidado de no seguir el mal ejemplo de esa gente, pues nuestro Dios la odia y por eso quiere sacarla de esa tierra.

Otro profeta


15-17 »Un día, nuestro Dios escogerá de entre ustedes a un hombre, que será profeta como yo. Cuando estábamos en el monte Horeb, ustedes me dijeron que no querían escuchar la voz de Dios, ni ver el fuego desde donde Dios hablaba, pues no querían morir. Pues bien, nuestro Dios les dará el profeta que pidieron, y ustedes deberán obedecerlo en todo.


18 »Dios elegirá ese profeta de entre el pueblo. Será uno de los nuestros, y hará lo mismo que ahora hago; es decir, les comunicará todo lo que Dios quiera decirles. 19 Dios castigará a quien no obedezca las órdenes que dé por medio de ese profeta.


20 »Si aparece alguno que diga traer un mensaje de parte de Dios, y que en realidad no haya sido enviado por él, deberán matarlo. Lo mismo deberán hacer con cualquier profeta que aparezca con mensajes de otros dioses.


21 »Ahora bien, si ustedes se preguntan cómo saber si una persona trae o no un mensaje de parte de Dios, sigan este consejo: 22 Si el profeta anuncia algo y no sucede lo que dijo, será señal de que Dios no lo envió. Ese profeta no es más que un orgulloso que habla por su propia cuenta, y ustedes no deberán tenerle miedo».

Las ciudades de refugio


19 Moisés continuó diciendo:


«Nuestro Dios va a destruir a la gente que ahora vive en el territorio que va a darles. Ustedes serán los nuevos dueños de las ciudades y las casas de esa gente. 2 Cuando suceda esto, deberán apartar tres ciudades 3-4 y arreglar el camino que lleva hasta ellas.


»Luego dividirán el país en tres regiones; una por cada ciudad. Así, cualquiera que sin quererlo mate a otra persona podrá ir a refugiarse en cualquiera de esas tres ciudades. Seguramente los familiares del muerto lo buscarán para vengarse, pero el que mató deberá probar que el muerto no era su enemigo, sino que todo fue un accidente.


5-6 »Supongamos que dos leñadores salen al bosque y que, al cortar leña, el hacha se le zafa a uno de ellos, y golpea a su compañero. Si a causa del golpe el otro muere, el que lo mató podrá refugiarse en una de esas ciudades. Si esas ciudades no estuvieran cerca, los familiares del muerto podrían alcanzar y matar al compañero, sin tomar en cuenta que todo fue un accidente. 7 Por eso les mando apartar esas tres ciudades.


8-10 »Si ustedes me hacen caso, y aman y obedecen a nuestro Dios, él les dará todo el territorio que prometió a sus antepasados. Cuando ya lo hayan recibido y ocupado, deberán apartar otras tres ciudades, para que sirvan de refugio. Así ninguno de ustedes será culpable de la muerte de un inocente.


11 »Ahora bien, supongamos que una persona odia a otra, y que la espera en un lugar alejado para atacarla y matarla cuando ésta pase. Si el asesino huye y busca refugio en una de estas ciudades, 12 los líderes de la ciudad a la que él pertenece mandarán traerlo, para que sea entregado a los familiares del muerto y se le condene a muerte.


13 »No perdonen a ningún asesino. No permitan que en Israel muera gente inocente. Así les irá bien en todo lo que hagan.


14 »En el país que Dios va a darles, deberán respetar los límites de la propiedad de cada persona. Esos límites fueron establecidos hace mucho tiempo.

Instrucciones acerca de los testigos


15 »Para acusar a alguien de haber cometido un crimen será necesario que se presenten dos o tres testigos. La acusación de un solo testigo no tendrá ningún valor.


16 »Si alguien es acusado de haber cometido un crimen, y uno de los testigos miente, 17 entonces el testigo y el acusado deberán ir al Santuario y presentarse ante los sacerdotes y jueces. 18 Éstos investigarán el asunto con mucho cuidado, y si descubren que el testigo está mintiendo, 19-21 ordenarán que el testigo reciba el mismo castigo que pedía para el acusado. Cobren ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, y vida por vida. No perdonen a nadie que cometa una falta. Si cumplen con estas instrucciones, nadie cometerá ninguna maldad, pues todos tendrán miedo de acusar a otro falsamente».

Leyes acerca de la guerra


20 Moisés continuó diciendo:


«Cuando vayan a la guerra, no tengan miedo. Aunque el enemigo sea muy fuerte y numeroso, y tenga muchos caballos y carros de combate, nosotros contamos con nuestro Dios, que nos libró de Egipto.


2 »Antes de entrar en batalla, el sacerdote le dirá a nuestro ejército: 3 “Escúchenme, israelitas, hoy van a pelear contra sus enemigos, pero no tengan miedo. ¡Hagan a un lado la cobardía, y sean valientes! 4 Nuestro Dios peleará por nosotros, y nos dará la victoria”.


5-6 »Luego los jefes del ejército les dirán a sus soldados:


“Si alguno de ustedes ha construido una casa, o ha plantado un viñedo, y todavía no ha disfrutado de ellos, es mejor que regrese a su casa. Puede ser que muera en la batalla, y otros serán los que disfruten de la casa o de las uvas.


7 ”Y si alguno de ustedes pensaba casarse en estos días, es mejor que regrese y se case. Puede ser que muera en la batalla, y otro será el que se case con su novia.


8 ”Y si alguno tiene miedo, es mejor que regrese ahora mismo, para que no contagie de miedo a los demás”.


9 »Después de esto, los capitanes del ejército se colocarán al frente de sus soldados y marcharán a la batalla. 10 Cuando ya estén cerca de la ciudad que vayan a atacar, procuren primero negociar la paz. 11 Si los habitantes de la ciudad aceptan el trato y los dejan entrar, ellos serán sus esclavos. 12 Pero si no lo aceptan, entonces ustedes rodearán la ciudad y la atacarán.


13-14 »Cuando Dios les haya dado la victoria sobre ellos, matarán ustedes a todos los hombres, pero dejarán con vida a las mujeres, a los niños y a los animales. Así ellos serán sus esclavos, y todo lo que encuentren en la ciudad será para ustedes.


15-18 »Esto mismo deberán hacer con todas las ciudades que ataquen y que estén lejos de su territorio. En las ciudades que estén en la tierra que Dios va a darles, no debe quedar con vida ningún hitita, ni amorreo, ni cananeo, ni fereseo, ni heveo ni jebuseo. Ninguno de estos pueblos debe quedar con vida, pues de lo contrario les enseñarán a ustedes a adorar a otros dioses. ¡Eso sería un gran pecado contra nuestro Dios! ¡Sería algo repugnante! Además, nuestro Dios nos ha ordenado destruirlos como una ofrenda en su honor.


19-20 »Ahora bien, cuando ataquen una ciudad durante mucho tiempo, y para vencerla tengan que cortar árboles, corten sólo árboles que no den fruta. No derriben los árboles frutales, pues la fruta les servirá de alimento. Además, los árboles son plantas indefensas, y no hombres que puedan defenderse».



Lucas 9:28-50

Traducción en lenguaje actual

Jesús se transforma


28 Ocho días después, Jesús llevó a Pedro, a Juan y a Santiago hasta un cerro alto, para orar. 29 Mientras Jesús oraba, su cara cambió de aspecto y su ropa se puso blanca y brillante. 30 De pronto aparecieron Moisés y el profeta Elías, 31 rodeados de una luz hermosa. Los dos hablaban con Jesús acerca de su muerte en Jerusalén, y de su resurrección y partida al cielo.


32 Pedro y los otros dos discípulos estaban muy cansados, pero lograron vencer el sueño y vieron a Jesús rodeado de su gloria, y Moisés y Elías estaban con él. 33 Cuando Moisés y Elías estaban a punto de irse, Pedro le dijo a Jesús: «Maestro, ¡qué bueno que estamos aquí! Si quieres, voy a construir tres enramadas: una para ti, otra para Moisés y otra para Elías.»


Pedro estaba hablando sin pensar en lo que decía. 34 Mientras hablaba, una nube bajó y se detuvo encima de todos ellos. Los tres discípulos tuvieron mucho miedo. 35 Luego, desde la nube se oyó una voz que decía: «¡Éste es mi Hijo, el Mesías que yo elegí! Ustedes deben obedecerlo.»


36 Después de oír la voz, los discípulos vieron que Jesús se había quedado solo. Y durante algún tiempo no le contaron a nadie lo que habían visto.

Jesús sana a un muchacho


37 Al día siguiente, cuando Jesús y sus tres discípulos bajaron del cerro, mucha gente les salió al encuentro. 38 Un hombre que estaba entre esa gente se acercó y le dijo a Jesús:


—Maestro, te ruego que ayudes a mi único hijo. 39 De repente un espíritu lo ataca, y lo hace gritar. También lo hace temblar terriblemente y echar espuma por la boca. Cuando por fin deja de atacarlo, el muchacho queda todo maltratado. 40 Le pedí a tus discípulos que sacaran al espíritu, pero no pudieron.


41 Jesús miró a sus seguidores y les dijo:


—¿No pueden hacer nada sin mí? ¿Hasta cuándo voy a tener que soportarlos? Ustedes están confundidos y no confían en Dios.


Entonces Jesús le dijo al hombre:


—Trae a tu hijo.


42 Cuando el muchacho se estaba acercando, el demonio lo atacó, lo tiró al suelo y lo hizo temblar muy fuerte. Entonces Jesús reprendió al demonio, sanó al muchacho y se lo entregó a su padre.


43 Toda la gente estaba asombrada del gran poder de Dios.

Jesús habla otra vez de su muerte


Mientras la gente seguía asombrada por todo lo que Jesús hacía, él les dijo a sus discípulos: 44 «Pongan mucha atención en lo que voy a decirles. Yo, el Hijo del hombre, seré entregado a mis enemigos.»


45 Los discípulos no entendieron lo que Jesús decía, pues aún no había llegado el momento de comprenderlo. Además, ellos tuvieron miedo de preguntarle qué había querido decir.

¿Quién es el más importante?


46 En cierta ocasión, los discípulos discutían acerca de cuál de ellos era el más importante de todos.


47 Cuando Jesús se dio cuenta de lo que ellos pensaban, llamó a un niño, lo puso junto a él, 48 y les dijo: «Si alguno acepta a un niño como éste, me acepta a mí. Y si alguno me acepta a mí, acepta a Dios, que fue quien me envió. El más humilde de todos ustedes es la persona más importante.»

Los que están a favor de Jesús


49 Juan, uno de los doce discípulos, le dijo a Jesús:


—Maestro, vimos a alguien que usaba tu nombre para echar demonios fuera de la gente. Pero nosotros le dijimos que no lo hiciera, porque él no es parte de nuestro grupo.


50 Pero Jesús le dijo:


—No se lo prohíban, porque quien no está en contra de ustedes, realmente está a favor de ustedes.



Salmos 73

Traducción en lenguaje actual

Libro 3 (Salmos 73—89)

¡Qué bueno es Dios!

SALMO 73 (72)

Himno de Asaf.


73 Dios es muy bueno con Israel

y con la gente sincera.

2

Yo estuve a punto de pecar;

poco me faltó para caer,

3

pues me llené de envidia

al ver cómo progresan

los orgullosos y los malvados.

4

¡Tan llenos están de salud

que no les preocupa nada!

5

No tienen los problemas de todos;

no sufren como los demás.

6

Se adornan con su orgullo

y exhiben su violencia.

7

¡Tan gordos están

que los ojos se les saltan!

¡En la cara se les ven

sus malos pensamientos!

8

Hablan mal de la gente;

¡de todo el mundo se burlan!

Tan grande es su orgullo

que sólo hablan de violencia.

9

Con sus palabras ofenden

a Dios y a todo el mundo.

10

¡Pero hay gente que los consulta

y cree todo lo que dicen!

11

Piensan que el Dios altísimo

no lo sabe ni llegará a saberlo.

12

¡Así son los malvados!

¡No se preocupan de nada,

y cada vez son más ricos!


13

¡De nada me sirvió hacer el bien

y evitar los malos pensamientos!

14

¡Esos malvados

me golpean a todas horas!

¡En cuanto amanece me castigan!

15

Si hubiera pensado como los malvados,

habría traicionado al pueblo de Dios.

16

Traté de entender esto,

pero me resultó muy difícil.

17

Entonces fui al santuario de Dios,

y fue allí donde entendí

cómo terminarán los malvados:

18

Dios los ha puesto en peligro,

y van hacia su propia desgracia.

19

En un abrir y cerrar de ojos

terminarán por ser destruidos;

el terror acabará con ellos.

20

Cuando Dios entre en acción,

hará que sean olvidados

como se olvida una pesadilla.


21

Dios mío,

yo estuve muy afligido;

me sentí muy amargado.

22

He sido muy testarudo;

me he portado mal contigo:

¡me he portado como una bestia!

23

A pesar de todo,

siempre he estado contigo;

tu poder me mantiene con vida,

24

y tus consejos me dirigen;

cuando este mundo llegue a su fin,

me recibirás con grandes honores.

25

¿A quién tengo en el cielo?

¡A nadie más que a ti!

Contigo a mi lado,

nada me falta en este mundo.

26

Ya casi no tengo fuerzas,

pero a ti siempre te tendré;

¡mi única fuerza eres tú!

27

Los que se apartan de ti

acabarán por ser destruidos;

los que no te sean fieles

acabarán perdiendo la vida.

28

Pero yo estaré cerca de ti,

que es lo que más me gusta.

Tú eres mi Dios y mi dueño,

en ti encuentro protección;

¡por eso quiero contar

todo lo que has hecho!



Proverbios 12:10

Traducción en lenguaje actual


10

Los buenos saben

que hasta los animales sufren,

pero los malvados

de nadie tienen compasión.

Traducción en lenguaje actual (TLA)


Copyright © 2000 by United Bible Societies

Sunday, March 30, 2025

DAB Español, Lunes 31 de Marzo

Día 091, DAB Español, Lunes 31 de Marzo


Deuteronomio 16:1-17:20; Lucas 9:7-27; Salmos 72; Proverbios 12:8-9 (Traducción en lenguaje actual (TLA))











Deuteronomio 16-17

Traducción en lenguaje actual

La fiesta de la Pascua


16 Moisés continuó diciendo al pueblo:


«En el mes de Abib[a] celebrarán la Pascua en honor de nuestro Dios. Recuerden que fue en una noche del mes de Abib cuando Dios nos libró de la esclavitud en Egipto.


2-7 »El primer día de la fiesta, por la noche, deberán ir al santuario y ofrecer a Dios una vaca y una oveja. No ofrezcan estos animales en las ciudades que Dios les dará, sino sólo en el santuario, y háganlo al caer la noche, que es cuando ustedes salieron de Egipto. Podrán comerse la carne de esos animales, pero sólo con pan sin levadura, y no deben dejar nada para el siguiente día. Deben comerse todo.


»La fiesta durará toda una semana. Durante esos días sólo comerán pan sin levadura, como el que comieron aquella noche, cuando a toda prisa salieron de Egipto. Ese pan será llamado “pan del sufrimiento”. Siempre que lo coman, deberán acordarse de lo que sufrieron en Egipto y de cómo salieron de allí. Durante toda esa semana de fiesta no debe hallarse ni una pizca de levadura en todo el país.


»Al día siguiente, una vez que hayan cocinado y comido el animal ofrecido a Dios, podrán regresar a su casa. 8 Durante los seis días restantes comerán pan sin levadura. El día séptimo nadie deberá trabajar, sino que celebrarán un culto especial en honor de nuestro Dios.

La fiesta de la cosecha


9-11 »Siete semanas después de que comience la cosecha, deberán celebrar en honor de nuestro Dios la fiesta de la cosecha. Esta fiesta la harán en el Santuario.


»Durante la fiesta le harán a Dios una ofrenda voluntaria, de acuerdo a lo que Dios les haya dado: si Dios les dio una cosecha abundante, también ustedes deberán darle una ofrenda abundante. A la fiesta deberán llevar a toda su familia y a todos sus esclavos. También deberán invitar a los huérfanos y a las viudas, así como a los de la tribu de Leví y a los refugiados que vivan en sus ciudades.


12 »Obedezcan estas leyes, y nunca olviden que también ustedes fueron esclavos en Egipto.

La fiesta de las enramadas


13-15 »Cuando hayan terminado de recoger la cosecha y de exprimir las uvas, deberán celebrar en honor de nuestro Dios la fiesta de las enramadas. Esta fiesta durará siete días, y en ella debe reinar la alegría. Deberán celebrarla en el Santuario, en compañía de sus familias y esclavos, y de los huérfanos y las viudas. También deberán invitar a los de la tribu de Leví y a los refugiados que vivan en sus ciudades. Así Dios los bendecirá con abundantes cosechas y en todos sus trabajos les irá bien.

Las tres fiestas


16-17 »Hay tres fiestas anuales, a las que no debe faltar ningún varón mayor de doce años: la fiesta de la Pascua, la fiesta de la cosecha y la fiesta de las enramadas. Estas fiestas deberán festejarlas en el Santuario, y nadie deberá presentarse a la fiesta sin una ofrenda para Dios. Según Dios los haya bendecido, será la ofrenda que presenten.

Los jueces


18-19 »Dios le dará ciudades a cada tribu, y en cada ciudad se nombrarán jueces y autoridades, que deberán tratar a todos por igual. Gobernarán y juzgarán al pueblo con honestidad, y no aceptarán ninguna clase de soborno. Los sobornos hacen que una persona sabia y sincera se vuelva injusta.


20 »Traten siempre a todos con justicia. Así disfrutarán de la vida y tomarán posesión del país que Dios les dará».

Leyes para celebrar el culto a Dios


21-22 Moisés continuó diciendo al pueblo:


«Cuando construyan un altar para adorar a nuestro Dios, no coloquen junto a él ninguna imagen de la diosa Astarté ni de otros dioses falsos. ¡Eso es algo que Dios no soporta!


17 »Si le ofrecen a Dios un toro o una oveja, asegúrense de que estén en perfecto estado, porque a él no le agradan las ofrendas con defectos.


2-3 »Nuestro Dios les dará ciudades donde puedan vivir. Pero tal vez haya quienes comiencen a adorar dioses falsos. Si adoran al sol, a la luna o a las estrellas, estarán desobedeciendo a Dios y rompiendo el pacto que hicieron con él. 4 Cuando sepan que alguno de ustedes está haciendo eso, antes que nada investiguen si es verdad. Y si realmente está cometiendo un pecado tan terrible, 5 lleven a esa persona ante el tribunal de la ciudad, que deberá condenarla a morir apedreada.


6 »Ahora bien, un solo testigo no basta para condenar a muerte a una persona. Sólo podrán condenar a muerte a alguien si hay dos o tres testigos de la falta cometida. 7 Si la persona es culpable, los primeros en arrojarle piedras serán los testigos; luego la apedreará todo el pueblo. Así lograrán que no haya maldad entre ustedes.


8 »En casos más difíciles, como cuando alguien mata a otro, o cuando en un gran pleito hay heridos, tendrán que ir al Santuario. 9 Allí hablarán con los sacerdotes y con quien en ese momento sea el juez, y les explicarán lo sucedido. Ellos decidirán qué hacer con el culpable. 10-11 Ustedes, por su parte, deberán seguir fielmente todas las instrucciones que ellos les den para castigarlo.


12 »Si alguno de ustedes, por orgullo, se niega a aceptar la decisión del juez o del sacerdote, que son servidores de Dios, será condenado a muerte.


»Si ustedes obedecen estos mandamientos, no habrá maldad en Israel, 13 porque el pueblo tendrá miedo y entenderá que no debe ser orgulloso».

Instrucciones acerca de los reyes


14 Moisés continuó diciendo:


«Cuando hayan conquistado el país que Dios les va a dar, y ya estén instalados en sus pueblos, tal vez querrán tener un rey que los gobierne, como lo tienen otros pueblos. 15 En tal caso, sólo podrán nombrar como rey al israelita que Dios elija. Ningún extranjero podrá ser rey de Israel.


16 »El rey que haya sido nombrado no deberá comprar grandes cantidades de caballos, ni mucho menos ir a conseguirlos en Egipto, porque Dios nos prohibió volver a ese país. 17 Tampoco deberá tener muchas esposas, porque ellas podrían llevarlo a desobedecer a Dios. Por último, ese rey tampoco deberá acumular mucho oro y plata.


18-20 »Cuando el rey que ustedes nombren comience a reinar, ordenará que le hagan una copia del libro que contiene los mandamientos de Dios. Esa copia quedará bajo su cuidado, y deberá leerla todos los días. Así el rey jamás se sentirá superior a los demás israelitas, sino que aprenderá a obedecer a Dios y a respetar todos sus mandamientos. Si el rey sigue estas instrucciones, él y sus descendientes reinarán sobre Israel para siempre. El libro original de la ley estará siempre al cuidado de los sacerdotes».

Footnotes


Deuteronomio 16:1 Abib: Primer mes del calendario lunar judío. En nuestro calendario solar corresponde al período que va de mediados de marzo a mediados de abril.



Lucas 9:7-27

Traducción en lenguaje actual

Herodes no sabe quién es Jesús


7 El rey Herodes Antipas se enteró de todo lo que estaba sucediendo, y se preocupó mucho porque algunas personas decían que Juan el Bautista había resucitado. 8 Otros decían que había aparecido el profeta Elías,[a] o que había resucitado alguno de los antiguos profetas. 9 Pero Herodes dijo: «¿Quién será este hombre, del que tanto se oye hablar? No puede ser Juan el Bautista, porque yo mismo ordené que lo mataran.»


Por eso, Herodes tenía mucho interés en conocer a Jesús.

Jesús da de comer a mucha gente


10 Cuando los doce apóstoles regresaron, le contaron a Jesús todo lo que habían hecho. Luego Jesús los llevó al pueblo de Betsaida, pues quería estar a solas con ellos. 11 Pero tan pronto como la gente se dio cuenta de que Jesús se había ido a Betsaida, lo siguió.


Jesús recibió amablemente a toda la gente, y empezó a hablarles acerca del reino de Dios. También sanó a los enfermos.


12 Cuando ya empezaba a oscurecer, los doce apóstoles fueron a decirle a Jesús:


—Envía a esta gente a los pueblos y caseríos cercanos, a buscar un lugar donde puedan comprar comida y pasar la noche. ¡Aquí no hay nada!


13 Jesús les dijo:


—Denles ustedes de comer.


Pero ellos respondieron:


—Sólo tenemos cinco panes y dos pescados. Si fuéramos a dar de comer a toda esta gente, tendríamos que ir a comprar comida, 14 pues hay más de cinco mil personas.


Pero Jesús les dijo:


—Hagan que la gente se siente en grupos de cincuenta.


15 Los discípulos hicieron lo que Jesús les ordenó.


16 Entonces Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados, miró al cielo y los bendijo. Luego los partió y dio los pedazos a los discípulos, para que ellos los repartieran entre la gente.


17 Todos comieron y quedaron satisfechos. Y con los pedazos que sobraron se llenaron doce canastas.

¿Quién es Jesús?


18 En una ocasión, Jesús estaba orando solo, y sus discípulos llegaron al lugar donde él estaba. Jesús les preguntó:


—¿Qué dice la gente acerca de mí?


19 Los discípulos contestaron:


—Algunos dicen que eres Juan el Bautista; otros dicen que eres el profeta Elías; otros dicen que eres alguno de los profetas antiguos, que ha resucitado.


20 Después Jesús les preguntó:


—¿Y ustedes qué opinan? ¿Quién soy yo?


Pedro contestó:


—Tú eres el Mesías que Dios envió.


21 Pero Jesús les ordenó a todos que no le contaran a nadie que él era el Mesías.

Jesús habla de su muerte


22 Jesús también les dijo a sus discípulos: «Yo, el Hijo del hombre, voy a sufrir mucho. Los líderes del país, los sacerdotes principales y los maestros de la Ley me rechazarán y me matarán; pero tres días después resucitaré.»


23 Después Jesús les dijo a todos los que estaban allí:


«Si alguno quiere ser mi discípulo, tiene que olvidarse de hacer lo que quiera. Tiene que estar siempre dispuesto a morir y hacer lo que yo mando. 24 Si alguno piensa que su vida es más importante que seguirme, entonces la perderá para siempre. Pero el que prefiera seguirme y elija morir por mí, ése se salvará. 25 De nada sirve que una persona sea dueña de todo el mundo, si al final se destruye a sí misma y se pierde para siempre.


26 »Si alguno se avergüenza de mí y de mis enseñanzas, entonces yo, el Hijo del hombre, me avergonzaré de esa persona cuando venga con todo mi poder, y con el poder de mi Padre y de los santos ángeles. 27 Les aseguro que algunos de ustedes, que están aquí conmigo, no morirán hasta que vean el reino de Dios.»

Footnotes


Lucas 9:8 Elías: Muchos judíos esperaban que el profeta Elías resucitara para preparar la venida del Mesías.



Salmos 72

Traducción en lenguaje actual

Himno en honor del rey

SALMO 72 (71)

Himno de Salomón.


72 Dios mío,

haz que el rey sea justo

como lo eres tú;

que nuestro futuro rey

actúe con tu misma rectitud.

2

Así el rey gobernará

a la gente humilde

con rectitud y justicia,

3

y en todo cerro y colina

tu pueblo tendrá

prosperidad y justicia.

4

El rey les hará justicia

a los pobres y necesitados;

¡los salvará de sus opresores!

¡Aplastará a quienes los maltratan!


5

¡Que viva el rey!

¡Que viva mucho tiempo,

como el sol y la luna!

6

¡Que sea como las lluvias,

que empapan la tierra

y los campos sembrados!

7

¡Que haya prosperidad y justicia

todo el tiempo que sea rey!

¡Que su reino permanezca

hasta que la luna deje de existir!


8

¡Que extienda el rey su dominio

de mar a mar y de oriente a occidente!

9

¡Que las tribus del desierto

reconozcan su dominio!

¡Que sean humillados sus enemigos!

10

¡Que le paguen impuestos

los reyes de Tarsis

y de los puertos lejanos!

¡Que le traigan regalos

los reyes de Arabia y de Etiopía!

11

¡Que todos los reyes

se arrodillen en su presencia!

¡Que todas las naciones

se pongan a su servicio!


12

El rey librará a los pobres

cuando ellos le pidan ayuda;

salvará a los afligidos

que no tienen quién los ayude.

13

Tendrá compasión de los pobres

y salvará a los necesitados

y a los desvalidos.

14

Los librará de quienes los oprimen

y los tratan con violencia,

porque la vida de ellos

es muy valiosa para él.


15

¡Que viva el rey!

¡Que reciba todo el oro de Sabá!

¡Que siempre se ore por él!

¡Que a todas horas se le bendiga!

16

¡Que abunde el trigo en el país!

¡Que se vean ondular los trigales

en lo alto de las montañas!

¡Que haya mucho trigo,

como en el monte Líbano!

¡Que haya gente en las ciudades

como hay hierba en el campo!


17

¡Que la fama del rey permanezca!;

¡que dure siempre como el sol!

¡Que repitan su nombre las naciones

cuando se bendigan unas a otras!

¡Que todas ellas bendigan al rey!


18

¡Bendito seas,

Dios de Israel!

Sólo tú haces maravillas.

19

¡Bendito seas por siempre!

¡Que tu grandeza llene toda la tierra!

¡Que así sea!


20

Aquí terminan los himnos de David, el hijo de Jesé.



Proverbios 12:8-9

Traducción en lenguaje actual


8

Al sabio se le alaba

por su sabiduría;

al tonto se le desprecia

por su estupidez.


9

Más vale pobre acompañado,

que rico abandonado.

Traducción en lenguaje actual (TLA)


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DAB Español, Miércoles 18 de Junio

Día 170, DAB Español, Miércoles 18 de Junio 1 Reyes 19:1-21; Hechos 12:1-23; Salmos 136; Proverbios 17:14-15 (Nueva Versión Internacional (N...