Thursday, June 29, 2017

DAB Español, Viernes 30 de Junio

Día 181

2 Reyes 17:1-18:12; Hechos 20:1-38; Salmos 148:1-14; Proverbios 18:6-7 (Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy)





2 Reyes 17:1-18:12 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

Causas de la Caída del Reino de Israel
17 En el año doce de Acaz, rey de Judá, Oseas, hijo de Ela, comenzó a reinar sobre Israel en Samaria, y reinó nueve años. 2 Hizo lo malo ante los ojos del Señor, aunque no como los reyes de Israel que habían sido antes de él. 3 Subió contra él Salmanasar, rey de Asiria, y Oseas fue hecho su siervo, y le pagaba tributo. 4 Pero el rey de Asiria descubrió una conspiración de[a] Oseas, quien había enviado mensajeros a So, rey de Egipto, y no había pagado tributo al rey de Asiria como había hecho año tras año. Por tanto el rey de Asiria lo detuvo y lo encadenó en la cárcel. 5 Entonces el rey de Asiria invadió todo el país y subió a Samaria, y le puso sitio por tres años. 6 En el año noveno de Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria y se llevó a Israel al destierro en Asiria, y los puso en Halah y en Habor, río de Gozán, y en las ciudades de los Medos.

7 Esto sucedió porque los Israelitas habían pecado contra el Señor su Dios, que los había sacado de la tierra de Egipto de bajo la mano de Faraón, rey de Egipto, y habían reverenciado a otros dioses; 8 y anduvieron en las costumbres de las naciones que el Señor había arrojado de delante de los Israelitas, y en las costumbres de los reyes de Israel que ellos habían introducido. 9 Los Israelitas secretamente hicieron cosas[b] que no eran rectas contra el Señor su Dios. Además se edificaron lugares altos en todas sus ciudades, desde las torres de atalaya hasta las ciudades fortificadas. 10 Se erigieron pilares sagrados y Aseras (deidades femeninas) sobre toda colina alta y bajo todo árbol frondoso. 11 Quemaron incienso allí en todos los lugares altos, como las naciones que el Señor se había llevado al destierro de delante de ellos; e hicieron cosas malas provocando al Señor. 12 Y sirvieron a ídolos, acerca de los cuales el Señor les había dicho: “Ustedes no harán esto.”

13 El Señor amonestaba a Israel y a Judá por medio de todos Sus profetas y de todo vidente, diciendo: “Vuélvanse de sus malos caminos y guarden Mis mandamientos, Mis estatutos conforme a toda la ley que ordené a sus padres y que les envié por medio de Mis siervos los profetas.” 14 Sin embargo, ellos no escucharon, sino que fueron tercos[c] como sus padres, que no creyeron en el Señor su Dios. 15 Desecharon Sus estatutos y el pacto que El había hecho con sus padres, y Sus advertencias con las cuales los había amonestado. Siguieron la vanidad y se hicieron vanos, y fueron en pos de las naciones que los rodeaban, respecto de las cuales el Señor les había ordenado que no hicieran como ellas. 16 Y abandonaron todos los mandamientos del Señor su Dios, y se hicieron imágenes fundidas de dos becerros; hicieron una Asera (deidad femenina), adoraron a todo el ejército de los cielos y sirvieron a Baal. 17 Hicieron pasar por el fuego a sus hijos y a sus hijas. Practicaron la adivinación y los encantamientos, y se entregaron a hacer lo malo ante los ojos del Señor, provocándolo. 18 Y el Señor se enojó en gran manera contra Israel y los quitó de su presencia. Sólo quedó la tribu de Judá.

19 Tampoco Judá guardó los mandamientos del Señor su Dios, sino que anduvieron en las costumbres[d] que Israel había introducido. 20 Y el Señor desechó a toda la descendencia[e] de Israel, y los afligió y los entregó en mano de saqueadores, hasta que los echó de su presencia. 21 Cuando El arrancó a Israel de la casa de David, ellos hicieron rey a Jeroboam, hijo de Nabat. Entonces Jeroboam apartó a Israel de seguir al Señor, y les hizo cometer un gran pecado. 22 Los Israelitas anduvieron en todos los pecados que había cometido Jeroboam; no se apartaron de ellos, 23 hasta que el Señor quitó a Israel de Su presencia, como El había hablado por medio de todos Sus siervos los profetas. E Israel fue llevado de su propia tierra al destierro, a Asiria, hasta hoy.

24 El rey de Asiria trajo hombres de Babilonia, de Cuta, de Ava[f], de Hamat y de Sefarvaim, y los puso en las ciudades de Samaria en lugar de los Israelitas. Y tomaron posesión de Samaria y habitaron en sus ciudades. 25 Al principio de habitar ellos allí, no temieron al Señor, así que el Señor envió leones entre ellos que mataron a muchos de ellos. 26 Entonces hablaron al rey de Asiria: “Las naciones que ha llevado al destierro a las ciudades de Samaria, no conocen la costumbre del dios de la tierra; por eso él ha enviado leones entre ellos, y es la causa por la que los leones los matan porque ellos no conocen la costumbre del dios de la tierra.”

27 Y el rey de Asiria ordenó: “Lleven allá a uno de los sacerdotes que ustedes llevaron al destierro, y que él vaya y habite allí; y que les enseñe la costumbre del dios de la tierra.” 28 Y vino uno de los sacerdotes que habían llevado al destierro desde Samaria, y habitó en Betel (Casa de Dios), y les enseñó cómo habían de temer al Señor. 29 Pero cada nación continuó haciendo sus propios dioses, y los pusieron en las casas de los lugares altos que los Samaritanos habían hecho, cada nación en las ciudades en que habitaban. 30 Y los hombres de Babilonia hicieron a Sucot Benot; los hombres de Cuta hicieron a Nergal; los hombres de Hamat hicieron a Asima; 31 y los Aveos hicieron a Nibhaz y a Tartac; y los de Sefarvaim quemaban a sus hijos en el fuego como ofrenda a Adramelec y Anamelec, dioses de Sefarvaim. 32 También temían (reverenciaban) al Señor pero nombraron de entre sí sacerdotes de los lugares altos, que oficiaban por ellos en las casas de los lugares altos. 33 Temían al Señor pero servían a sus dioses conforme a la costumbre de las naciones de donde habían sido llevados al destierro.

34 Hasta el día de hoy siguen haciendo conforme a sus antiguas costumbres. No temen (reverencian) al Señor, ni siguen sus estatutos ni sus ordenanzas ni la ley ni el mandamiento que el Señor había ordenado a los hijos de Jacob, a quien puso el nombre de Israel, 35 con los cuales el Señor hizo un pacto y les ordenó: “No temerán (reverenciarán) a otros dioses ni se inclinarán ante ellos, no los servirán ni les ofrecerán sacrificios. 36 Sino que al Señor, que los hizo subir de la tierra de Egipto con gran poder y con brazo extendido, a El temerán (reverenciarán) y ante El se inclinarán y a El ofrecerán sacrificios. 37 Y los estatutos, las ordenanzas, la ley y el mandamiento que El les escribió, cuidarán de cumplirlos siempre, y no temerán a otros dioses. 38 Y el pacto que he hecho con ustedes, no lo olvidarán, ni temerán a otros dioses. 39 Sino que al Señor su Dios temerán, y El los librará de mano de todos sus enemigos.”

40 Pero ellos no escucharon, sino que hicieron conforme a su antigua costumbre. 41 Y aunque estas naciones temían al Señor, también servían a sus ídolos; y de la misma manera que hicieron sus padres, así hacen hasta hoy sus hijos y sus nietos.

Ezequías Rey de Judá
18 En el año tercero de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías, hijo de Acaz, rey de Judá. 2 Tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veintinueve años en Jerusalén. El nombre de su madre era Abi[g], hija de Zacarías. 3 Hizo lo recto ante los ojos del Señor, conforme a todo lo que su padre David había hecho. 4 Quitó los lugares altos, derribó los pilares sagrados y cortó la Asera (deidad femenina). También hizo pedazos la serpiente de bronce que Moisés había hecho, porque hasta aquellos días los Israelitas le quemaban incienso; y la llamaban Nehustán[h].

5 Ezequías confió en el Señor, Dios de Israel. Después de él, no hubo ninguno como él entre todos los reyes de Judá, ni entre los que fueron antes de él, 6 porque se apegó al Señor; no se apartó de El, sino que guardó los mandamientos que el Señor había ordenado a Moisés. 7 El Señor estaba con él; adondequiera que iba prosperaba. Se rebeló contra el rey de Asiria y no le sirvió. 8 Derrotó[i] a los Filisteos hasta Gaza y su territorio, desde las torres de atalaya hasta las ciudades fortificadas.

9 En el año cuarto del rey Ezequías, que era el año séptimo de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, Salmanasar, rey de Asiria, subió contra Samaria y la sitió, 10 y después de tres años la tomaron. En el año sexto de Ezequías, que era el año noveno de Oseas, rey de Israel, Samaria fue tomada. 11 Y el rey de Asiria llevó a Israel al destierro en Asiria, y los puso en Halah y en el Habor, río de Gozán, y en las ciudades de los Medos, 12 porque no obedecieron la voz del Señor su Dios, sino que quebrantaron Su pacto, es decir, todo lo que Moisés, siervo del Señor, había ordenado; no escucharon, ni lo cumplieron.

Footnotes:

2 Reyes 17:4 Lit en
2 Reyes 17:9 O pronunciaron palabras
2 Reyes 17:14 Lit endurecieron su cerviz
2 Reyes 17:19 Lit los estatutos
2 Reyes 17:20 Lit simiente
2 Reyes 17:24 En 2 Rey 18:34, Iva
2 Reyes 18:2 En 2 Cró 29:1, Abías
2 Reyes 18:4 I.e. pedazo de bronce
2 Reyes 18:8 Lit Hirió
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
© 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, California

Hechos 20 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

Viaje de Pablo por Macedonia y Grecia
20 Después que cesó el alboroto, Pablo mandó llamar a los discípulos, y habiéndolos exhortado, despidiéndose, partió para ir a Macedonia. 2 Y después de recorrer aquellas regiones y de haberlos exhortado mucho, llegó a Grecia. 3 Pasó allí tres meses, y habiéndose tramado un plan en su contra de parte de los Judíos cuando estaba por embarcarse para Siria, tomó la decisión de regresar por Macedonia.

4 Lo acompañaban Sópater de Berea, hijo de Pirro; Aristarco y Segundo de los Tesalonicenses; Gayo de Derbe, y Timoteo; Tíquico y Trófimo de Asia (provincia occidental de Asia Menor). 5 Pero éstos se habían adelantado y nos esperaban en Troas. 6 Nos embarcamos en Filipos después de los días de la Fiesta de los Panes sin Levadura[a], y en cinco días llegamos adonde ellos estaban en Troas; y allí nos quedamos siete días.

Despedida de Pablo en Troas
7 El primer día de la semana, cuando estábamos reunidos para partir el pan, Pablo les hablaba, pensando salir al día siguiente, y prolongó su discurso[b] hasta la medianoche. 8 Había muchas lámparas en el aposento alto donde estábamos reunidos. 9 Y estaba sentado en la ventana un joven llamado Eutico. Como Pablo continuaba hablando, Eutico fue cayendo en un profundo sueño hasta que, vencido por el sueño, se cayó desde el tercer piso y lo levantaron muerto. 10 Pero Pablo bajó y se tendió sobre él, y después de abrazarlo, dijo: “No se alarmen[c], porque está vivo[d].”

11 Volviendo arriba, después de partir el pan y de comer[e], conversó largamente con ellos hasta el amanecer, y entonces se marchó. 12 Al muchacho se lo llevaron vivo, y quedaron grandemente[f] consolados.

Viaje de Troas a Mileto
13 Entonces nosotros, adelantándonos a tomar la nave, salimos para Asón, con el propósito de recoger allí a Pablo, pues así lo había decidido, deseando él ir por tierra[g] hasta Asón. 14 Cuando nos encontró en Asón, lo recibimos a bordo y nos dirigimos a Mitilene. 15 Saliendo de allí, al día siguiente llegamos frente a Quío; y al otro día atracamos en Samos. Habiendo hecho escala en Trogilio[h], al día siguiente llegamos a Mileto. 16 Porque Pablo había decidido dejar a un lado a Efeso para no detenerse en Asia, pues se apresuraba para estar, en Jerusalén el día de Pentecostés si le era posible.

17 Desde Mileto mandó mensaje a Efeso y llamó a los ancianos de la iglesia.

Despedida en Mileto
18 Cuando vinieron a él, les dijo:

“Ustedes bien saben cómo he sido con ustedes todo el tiempo, desde el primer día que estuve[i] en Asia. 19 He servido al Señor con toda humildad, con lágrimas y con pruebas que vinieron sobre mí por causa de las intrigas de los Judíos. 20 Bien saben cómo no rehuí declararles a ustedes nada que fuera útil, y de enseñarles públicamente y de casa en casa[j], 21 testificando solemnemente, tanto a Judíos como a Griegos, del arrepentimiento para con Dios y de la fe en nuestro Señor Jesucristo.

22 “Ahora yo, atado en espíritu[k], voy a Jerusalén sin saber lo que allá me sucederá, 23 salvo que el Espíritu Santo solemnemente me da testimonio en cada ciudad, diciendo que me esperan cadenas y aflicciones. 24 Pero en ninguna manera estimo mi vida como valiosa para mí mismo, a fin de poder terminar mi carrera[l] y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio solemnemente del evangelio de la gracia de Dios.

25 “Y ahora, yo sé que ninguno de ustedes, entre quienes anduve predicando el reino, volverá a ver mi rostro. 26 Por tanto, les doy testimonio[m] en este día de que soy inocente[n] de la sangre de todos, 27 pues no rehuí declararles todo el propósito[o] de Dios.

28 “Tengan cuidado de sí mismos y de toda la congregación, en medio de la cual el Espíritu Santo les ha hecho obispos (supervisores) para pastorear la iglesia de Dios, la cual El compró[p] con Su propia sangre. 29 Sé que después de mi partida, vendrán lobos feroces entre ustedes que no perdonarán el rebaño. 30 También de entre ustedes mismos se levantarán algunos[q] hablando cosas perversas para arrastrar a los discípulos tras ellos. 31 Por tanto, estén alerta, recordando que por tres años, de noche y de día, no cesé de amonestar a cada uno con lágrimas.

32 “Ahora los encomiendo a Dios[r] y a la palabra de Su gracia, que es poderosa para edificarlos y darles la herencia entre todos los santificados. 33 Ni la plata, ni el oro, ni la ropa de nadie he codiciado. 34 Ustedes saben que estas manos me sirvieron para mis propias necesidades y las de los que estaban conmigo. 35 En todo les mostré que así, trabajando, deben ayudar a los débiles, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: ‘Más bienaventurado es dar que recibir.’”

36 Cuando Pablo terminó de hablar[s], se arrodilló y oró con todos ellos. 37 Comenzaron todos a llorar desconsoladamente[t], y abrazando a[u] Pablo, lo besaban. 38 Estaban afligidos[v] especialmente por la palabra que había dicho de que ya no volverían a ver su rostro. Y lo acompañaron hasta el barco.

Footnotes:

Hechos 20:6 O de los Azimos
Hechos 20:7 Lit la palabra
Hechos 20:10 O Dejen de estar atribulados
Hechos 20:10 Lit su vida está en él
Hechos 20:11 Lit probar
Hechos 20:12 Lit no poco
Hechos 20:13 Lit a pie
Hechos 20:15 Los mss. más antiguos no incluyen: habiendo hecho...Trogilio
Hechos 20:18 Lit puse el pie
Hechos 20:20 O en los varios hogares privados
Hechos 20:22 O en el Espíritu
Hechos 20:24 Algunos mss. agregan: con gozo
Hechos 20:26 O los llamo como testigos
Hechos 20:26 Lit limpio
Hechos 20:27 O consejo, o, designio
Hechos 20:28 Lit adquirió
Hechos 20:30 Lit hombres
Hechos 20:32 Un ms. antiguo dice: al Señor
Hechos 20:36 Lit Y diciendo esto
Hechos 20:37 Lit hubo un considerable llanto de todos
Hechos 20:37 Lit y echándose al cuello de
Hechos 20:38 Lit sufriendo dolor
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
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Salmos 148 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

Alabe la Creación al Señor
148 ¡Aleluya!
Alaben al Señor desde los cielos;
Alábenlo en las alturas.
2 Alábenlo, todos Sus ángeles;
Alábenlo, todos Sus ejércitos.
3 Alábenlo, sol y luna;
Alábenlo, todas las estrellas luminosas.
4 Alábenlo, cielos de los cielos,
Y las aguas que están sobre los cielos.
5 Alaben ellos el nombre del Señor,
Pues El ordenó y fueron creados;
6 Los estableció eternamente y para siempre,
Les dio ley que no pasará.
7 Alaben al Señor desde la tierra,
Monstruos marinos y todos los abismos;
8 Fuego y granizo, nieve y bruma;
Viento tempestuoso que cumple Su palabra;
9 Los montes y todas las colinas;
árboles frutales y todos los cedros;
10 Las fieras y todo el ganado;
Reptiles y aves que vuelan;
11 Reyes de la tierra y todos los pueblos;
Príncipes y todos los jueces de la tierra;
12 Jóvenes y también vírgenes;
Los ancianos junto con los niños.
13 Alaben ellos el nombre del Señor,
Porque sólo Su nombre es exaltado;
Su gloria es sobre tierra y cielos.
14 El ha exaltado el poder de Su pueblo,
Alabanza para todos Sus santos,
Para los Israelitas, pueblo a El cercano.
¡Aleluya!
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Proverbios 18:6-7 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

6 Los labios del necio provocan[a] riña,
Y su boca llama a los golpes.
7 La boca del necio es su ruina,
Y sus labios una trampa para su alma.
Footnotes:

Proverbios 18:6 Lit vienen con
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