Día 22, DAB Español, Lunes 22 de Enero
Génesis 44:1-45:28; Mateo 14:14-36; Salmos 18:35-50; Proverbios 4:11-13 (La Biblia de las Américas (LBLA))
Génesis 44-45 La Biblia de las Américas (LBLA)
La copa de José
44 Entonces José
ordenó al mayordomo de su casa, diciendo: Llena de alimento los costales de los
hombres, todo lo que puedan llevar, y pon el dinero de cada uno de ellos en la
boca de su costal. 2 Y mi copa, la copa de plata, ponla en la boca del costal
del menor, con el dinero de su grano. Y él hizo conforme a lo[a] que había
dicho José. 3 Al rayar el alba[b], fueron despedidos los hombres con sus asnos.
4 Cuando habían salido ellos de la ciudad, y no estaban muy lejos, José dijo al
mayordomo de su casa: Levántate, sigue a esos[c] hombres; y cuando los
alcances, diles: “¿Por qué habéis pagado mal por bien?[d] 5 “¿No es esta la
copa en que bebe mi señor, y que de hecho usa para adivinar? Obrasteis mal en
lo que hicisteis.”
6 Así que los
alcanzó, les dijo estas palabras. 7 Y ellos le dijeron: ¿Por qué habla mi señor
de esta manera[e]? Lejos esté de tus siervos hacer tal cosa. 8 He aquí, el
dinero que encontramos en la boca de nuestros costales, te lo volvimos a traer
de la tierra de Canaán. ¿Cómo, pues, habíamos de robar de la casa de tu señor
plata u oro? 9 Aquel de tus siervos que sea hallado con ella, que muera, y
también nosotros entonces seremos esclavos de mi señor. 10 Y él dijo: Sea ahora
también conforme a vuestras palabras; aquel que sea hallado con ella será mi
esclavo, y los demás de vosotros seréis inocentes. 11 Ellos se dieron prisa;
cada uno bajó su costal a tierra, y cada cual abrió su costal. 12 Y él
registró, comenzando con el mayor y acabando con el menor; y la copa fue
hallada en el costal de Benjamín. 13 Entonces ellos rasgaron sus vestidos, y
después de cargar cada uno su asno, regresaron a la ciudad.
14 Cuando Judá llegó
con sus hermanos a casa de José, él estaba aún allí, y ellos cayeron a tierra
delante de él. 15 Y José les dijo: ¿Qué acción es esta que habéis hecho? ¿No
sabéis que un hombre como yo puede ciertamente adivinar? 16 Entonces dijo Judá:
¿Qué podemos decir a mi señor? ¿Qué podemos hablar y cómo nos justificaremos? Dios
ha descubierto la iniquidad de tus siervos; he aquí, somos esclavos de mi
señor, tanto nosotros como aquel en cuyo poder[f] fue encontrada la copa. 17
Mas él respondió: Lejos esté de mí hacer eso. El hombre en cuyo poder[g] ha
sido encontrada la copa será mi esclavo; pero vosotros, subid en paz a vuestro
padre.
Judá intercede por
Benjamín
18 Entonces Judá se
le acercó, y dijo: Oh señor mío, permite a tu siervo hablar una palabra a los
oídos de mi señor, y que no se encienda tu ira contra tu siervo, pues tú eres
como Faraón mismo. 19 Mi señor preguntó a sus siervos, diciendo: “¿Tenéis padre
o hermano?” 20 Y respondimos a mi señor: “Tenemos un padre ya anciano y un
hermano[h] pequeño, hijo de su vejez. Y su hermano ha muerto, así que sólo
queda él de los hijos de su madre, y su padre lo ama.” 21 Entonces tú dijiste a
tus siervos: “Traédmelo para que yo lo vea[i].” 22 Y nosotros respondimos a mi
señor: “El muchacho no puede dejar a su padre, pues si dejara a su padre, éste
moriría.” 23 Tú, sin embargo, dijiste a tus siervos: “Si vuestro hermano menor
no desciende con vosotros, no volveréis a ver mi rostro.” 24 Aconteció, pues,
que cuando subimos a mi padre, tu siervo, le contamos las palabras de mi señor.
25 Y nuestro padre dijo: “Regresad, compradnos un poco de alimento.” 26 Mas
nosotros respondimos: “No podemos ir[j]. Si nuestro hermano menor va[k] con
nosotros, entonces iremos[l]; porque no podemos ver el rostro del hombre si
nuestro hermano no está con nosotros.” 27 Y mi padre, tu siervo, nos dijo: “Vosotros
sabéis que mi mujer me dio a luz dos hijos; 28 el uno salió de mi lado, y dije:
‘Seguro que ha sido despedazado’, y no lo he visto desde entonces. 29 “Y si
también os lleváis a éste de mi presencia[m], y algo malo le sucede, haréis
descender mis canas con dolor[n] al Seol[o].” 30 Ahora pues, cuando yo vuelva a
mi padre, tu siervo, y el muchacho no esté con nosotros, como su vida[p] está
ligada a la vida del muchacho[q], 31 sucederá que cuando él vea que el muchacho
no está con nosotros, morirá. Así pues, tus siervos harán descender las canas
de nuestro padre, tu siervo, con dolor al Seol. 32 Porque yo, tu siervo, me
hice responsable[r] del muchacho con mi padre, diciendo: “Si no te lo traigo,
que lleve yo la culpa[s] delante de mi padre para siempre[t].” 33 Ahora pues,
te ruego que quede este tu siervo como esclavo de mi señor, en lugar del
muchacho, y que el muchacho suba con sus hermanos. 34 Pues, ¿cómo subiré a mi
padre no estando el muchacho conmigo, sin que yo vea el mal que sobrevendrá[u]
a mi padre?
José se da a conocer
a sus hermanos
45 José no pudo ya
contenerse delante de todos los que estaban junto a él, y exclamó: Haced salir
a todos de mi lado. Y no había[v] nadie con él cuando José se dio a conocer a
sus hermanos. 2 Y lloró tan fuerte[w] que lo oyeron los egipcios, y la casa de
Faraón se enteró[x] de ello. 3 José dijo a sus hermanos: Yo soy José. ¿Vive
todavía mi padre? Pero sus hermanos no podían contestarle porque estaban
atónitos delante de él. 4 Y José dijo a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y
ellos se acercaron, y él dijo: Yo soy vuestro hermano José, a quien vosotros
vendisteis a Egipto. 5 Ahora pues, no os entristezcáis ni os pese[y] el haberme
vendido aquí; pues para preservar vidas me envió Dios delante de vosotros. 6
Porque en estos dos años ha habido hambre en la tierra y todavía quedan otros
cinco años en los cuales no habrá ni siembra[z] ni siega. 7 Y Dios me envió
delante de vosotros para preservaros un remanente en la tierra, y para
guardaros con vida mediante una gran liberación[aa]. 8 Ahora pues, no fuisteis
vosotros los que me enviasteis aquí, sino Dios; y El me ha puesto por padre de
Faraón y señor de toda su casa y gobernador sobre toda la tierra de Egipto. 9
Daos prisa y subid adonde mi padre, y decidle: “Así dice tu hijo José: ‘Dios me
ha hecho señor de todo Egipto; ven[ab] a mí, no te demores. 10 ‘Y habitarás en
la tierra de Gosén, y estarás cerca de mí, tú y tus hijos y los hijos de tus
hijos, tus ovejas y tus vacas y todo lo que tienes. 11 ‘Allí proveeré también
para ti, pues aún quedan cinco años de hambre, para que no pases hambre[ac] tú,
tu casa y todo lo que tienes.’” 12 Y he aquí, vuestros ojos y los ojos de mi
hermano Benjamín ven que es mi boca la que os habla. 13 Notificad, pues, a mi
padre toda mi gloria en Egipto y todo lo que habéis visto; daos prisa y
traed[ad] aquí a mi padre. 14 Entonces se echó sobre el cuello de su hermano
Benjamín, y lloró; y Benjamín también lloró sobre su cuello. 15 Y besó a todos
sus hermanos, y lloró sobre ellos; y después sus hermanos hablaron con él.
Invitación de Faraón
16 Cuando se oyó la
noticia[ae] en la casa de Faraón, de[af] que los hermanos de José habían
venido, le agradó a Faraón y a[ag] sus siervos. 17 Entonces Faraón dijo a José:
Di a tus hermanos: “Haced esto: cargad vuestras bestias e id[ah] a la tierra de
Canaán; 18 y tomad a vuestro padre y a vuestras familias[ai] y venid a mí y yo
os daré lo mejor[aj] de la tierra de Egipto, y comeréis de la abundancia[ak] de
la tierra.” 19 Y a ti se te ordena decirles: “Haced esto: tomad[al] carretas de
la tierra de Egipto para vuestros pequeños y para vuestras mujeres, y traed a
vuestro padre y venid. 20 “Y no os preocupéis por vuestras posesiones
personales[am], pues lo mejor[an] de toda la tierra de Egipto es vuestro.”
Regreso a Canaán
21 Y así lo hicieron
los hijos de Israel; y José les dio carretas conforme a la orden[ao] de Faraón,
y les dio provisiones para el camino. 22 A todos ellos les dio[ap] mudas de
ropa, pero a Benjamín le dio trescientas piezas de plata y cinco mudas de ropa.
23 Y a su padre le envió lo siguiente[aq]: diez asnos cargados de lo mejor[ar]
de Egipto, y diez asnas cargadas de grano, de pan y de alimentos para su padre
en[as] el camino. 24 Luego despidió a sus hermanos, y cuando se iban les dijo:
No riñáis[at] en el camino. 25 Y subieron de Egipto y vinieron a la tierra de
Canaán, a su padre Jacob. 26 Y le informaron, diciendo: José vive todavía, y es
gobernante en toda la tierra de Egipto. Pero él se quedó atónito[au] porque no
les podía creer. 27 Pero cuando ellos le contaron todas las cosas[av] que José
les había dicho, y cuando vio las carretas que José había enviado para
llevarlo, el espíritu de su padre Jacob revivió. 28 Entonces Israel dijo:
Basta, mi hijo José vive todavía. Iré y lo veré antes que yo muera.
Footnotes:
Génesis 44:2 O, a la
palabra
Génesis 44:3 Lit., La
mañana era luz y
Génesis 44:4 Lit.,
los
Génesis 44:4 Algunas
versiones antiguas agregan: ¿Por qué me habéis robado la copa de plata?
Génesis 44:7 Lit.,
estas palabras
Génesis 44:16 Lit.,
cuya mano
Génesis 44:17 Lit.,
cuya mano
Génesis 44:20 Lit.,
niño
Génesis 44:21 Lit.,
Bajádmelo, para que ponga mis ojos sobre él
Génesis 44:26 Lit.,
descender
Génesis 44:26 Lit.,
está
Génesis 44:26 Lit.,
descenderemos
Génesis 44:29 Lit.,
rostro
Génesis 44:29 Lit.,
mal
Génesis 44:29 I.e.,
región de los muertos
Génesis 44:30 Lit.,
alma
Génesis 44:30 Lit., a
su alma
Génesis 44:32 Lit.,
tu siervo se hizo fiador
Génesis 44:32 Lit.,
habré pecado
Génesis 44:32 Lit.,
todos los días
Génesis 44:34 Lit.,
hallará
Génesis 45:1 Lit., no
quedó
Génesis 45:2 Lit., Y
prorrumpió su voz en llanto
Génesis 45:2 Lit.,
oyó
Génesis 45:5 Lit., ni
os enojéis en vuestros ojos
Génesis 45:6 Lit.,
arada
Génesis 45:7 Lit.,
escapada
Génesis 45:9 Lit.,
desciende
Génesis 45:11 O, seas
empobrecido
Génesis 45:13 Lit., descended
Génesis 45:16 Lit., voz
Génesis 45:16 Lit.,
diciendo
Génesis 45:16 Lit.,
fue bueno en los ojos de Faraón y en los ojos de
Génesis 45:17 Lit., y
venid, id
Génesis 45:18 Lit.,
casas
Génesis 45:18 Lit.,
lo bueno
Génesis 45:18 Lit.,
grosura
Génesis 45:19 Lit.,
tomad para vosotros
Génesis 45:20 Lit., Y
que vuestros ojos no miren con pesar vuestros enseres
Génesis 45:20 Lit.,
lo bueno
Génesis 45:21 Lit.,
boca
Génesis 45:22 Lit.,
dio a cada uno
Génesis 45:23 Lit.,
así
Génesis 45:23 Lit.,
bueno
Génesis 45:23 Lit.,
para
Génesis 45:24 Lit.,
os agitéis
Génesis 45:26 Lit.,
su corazón languideció
Génesis 45:27 Lit.,
palabras
La Biblia de las
Américas (LBLA)
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Mateo 14:14-36 La Biblia de las Américas (LBLA)
14 Y al
desembarcar[a], vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos y sanó a sus
enfermos. 15 Al atardecer se le acercaron los discípulos, diciendo: El lugar
está desierto y la hora es ya avanzada; despide, pues, a las multitudes para
que vayan a las aldeas y se compren alimentos. 16 Pero Jesús les dijo: No hay
necesidad de que se vayan; dadles vosotros de comer. 17 Entonces ellos le
dijeron*: No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces. 18 El les dijo:
Traédmelos acá. 19 Y ordenando a la muchedumbre que se recostara sobre la
hierba, tomó los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo,
bendijo los alimentos, y partiendo los panes, se los dio a los discípulos y los
discípulos a la multitud. 20 Y comieron todos y se saciaron. Y recogieron lo
que sobró de los pedazos: doce cestas llenas. 21 Y los que comieron fueron unos
cinco mil hombres, sin contar las mujeres y los niños.
Jesús anda sobre el
mar
22 Enseguida hizo que
los discípulos[b] subieran a la barca y fueran delante de El a la otra orilla,
mientras El despedía a la multitud. 23 Después de despedir a la multitud, subió
al monte a solas para orar; y al anochecer, estaba allí solo. 24 Pero la barca
estaba ya a muchos estadios[c] de tierra, y era azotada[d] por las olas, porque
el viento era contrario. 25 Y a la cuarta vigilia de la noche[e], Jesús vino a
ellos andando sobre el mar. 26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar,
se turbaron, y decían: ¡Es un fantasma! Y de miedo, se pusieron a gritar. 27
Pero enseguida Jesús les habló, diciendo: Tened ánimo, soy yo; no temáis. 28
Respondiéndole Pedro, dijo: Señor, si eres tú, mándame que vaya a ti sobre las
aguas. 29 Y El dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, caminó sobre las
aguas, y fue hacia Jesús. 30 Pero viendo la fuerza del viento tuvo miedo, y
empezando a hundirse gritó, diciendo: ¡Señor, sálvame! 31 Y al instante Jesús,
extendiendo la mano, lo sostuvo y le dijo*: Hombre de poca fe, ¿por qué
dudaste? 32 Cuando ellos subieron a la barca, el viento se calmó. 33 Entonces
los que estaban en la barca le adoraron, diciendo: En verdad eres Hijo de Dios.
34 Terminada la
travesía, bajaron a[f] tierra en Genesaret. 35 Y cuando los hombres de aquel
lugar reconocieron a Jesús[g], enviaron a decirlo por toda aquella comarca de
alrededor y le trajeron todos los que tenían algún mal. 36 Y le rogaban que les
dejara tocar siquiera el borde de su manto; y todos los que lo tocaban quedaban
curados.
Footnotes:
Mateo 14:14 Lit., Y
saliendo
Mateo 14:22 Lit.,
obligó a los discípulos que
Mateo 14:24 Un
estadio equivale aprox. a 180 metros
Mateo 14:24 Lit.,
atormentada
Mateo 14:25 I.e.,
entre las tres y las seis de la mañana
Mateo 14:34 Lit.,
llegaron a la
Mateo 14:35 Lit., El
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Américas (LBLA)
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Salmos 18:35-50 La Biblia de las Américas (LBLA)
35 Tú me has dado
también el escudo de tu salvación;
tu diestra me
sostiene,
y tu benevolencia me
engrandece.
36 Ensanchas mis
pasos debajo de mí,
y mis pies[a] no han
resbalado.
37 Perseguí a mis
enemigos y los alcancé;
y no me volví hasta
acabarlos.
38 Los destrocé y no
pudieron levantarse;
cayeron debajo de mis
pies.
39 Pues tú me has
ceñido con fuerza para la batalla;
has subyugado[b]
debajo de mí a los que contra mí se levantaron.
40 También has hecho
que mis enemigos me vuelvan las espaldas,
y destruí[c] a los
que me odiaban.
41 Clamaron, mas no
hubo quién los salvara;
aun al Señor
clamaron, mas no les respondió.
42 Entonces los
desmenucé como polvo delante del viento;
los arrojé[d] como
lodo de las calles.
43 Tú me has librado
de las contiendas del pueblo;
me has puesto por
cabeza de las naciones;
pueblo que yo no
conocía me sirve.
44 Al oírme, me
obedecen;
los extranjeros me
fingen obediencia[e].
45 Los extranjeros
desfallecen,
y salen temblando de
sus fortalezas[f].
46 El Señor vive,
bendita sea mi roca,
y ensalzado sea el
Dios de mi salvación,
47 el Dios que por mí
ejecuta venganza,
y subyuga pueblos
debajo de mí;
48 el que me libra de
mis enemigos.
Ciertamente tú me
exaltas sobre los que se levantan contra mí;
me rescatas del
hombre violento.
49 Por tanto, te
alabaré, oh Señor, entre las naciones,
y cantaré alabanzas a
tu nombre.
50 Grandes
victorias[g] da El a su rey,
y muestra
misericordia a su ungido,
a David y a su
descendencia[h] para siempre.
Footnotes:
Salmos 18:36 Lit.,
tobillos
Salmos 18:39 Lit.,
has hecho postrar
Salmos 18:40 O, callé
Salmos 18:42 Lit.,
vacié
Salmos 18:44 Lit., me
engañan
Salmos 18:45 Lit.,
encierros
Salmos 18:50 Lit.,
salvaciones
Salmos 18:50 Lit.,
simiente
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Proverbios 4:11-13 La Biblia de las Américas (LBLA)
11 Por el camino de
la sabiduría te he conducido,
por sendas de
rectitud te he guiado.
12 Cuando andes, tus
pasos no serán obstruidos,
y si corres, no
tropezarás.
13 Aférrate a la
instrucción, no la sueltes;
guárdala, porque ella
es tu vida.
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