Día 68, DAB Español, Viernes 9 de Marzo
Números 11:24-13:33; Marcos 14:22-52; Salmos 52; Proverbios 11:1-3 (Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH))
Números
11:24-13:33 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
24 Salió Moisés y dijo al pueblo las palabras del
Señor. Reunió después a setenta hombres de los ancianos del pueblo y los colocó
alrededor de la tienda. 25 Entonces el Señor descendió en la nube y le habló; y
tomó del Espíritu que estaba sobre él y lo colocó sobre los setenta ancianos. Y
sucedió que cuando el Espíritu reposó sobre ellos, profetizaron; pero no
volvieron a hacerlo más.
26 Pero dos hombres habían quedado en el campamento;
uno se llamaba Eldad, y el otro se llamaba Medad. Y el Espíritu reposó sobre
ellos, (ellos estaban entre los que se habían inscrito, pero no habían salido a
la tienda), y profetizaron en el campamento. 27 Y un joven corrió y avisó a
Moisés: “Eldad y Medad están profetizando en el campamento.” 28 Entonces
respondió Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde su juventud: “Moisés,
señor mío, detenlos.” 29 Pero Moisés le dijo: “¿Tienes celos por causa mía?
¡Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta, que el Señor pusiera Su Espíritu
sobre ellos!” 30 Después Moisés volvió al campamento, y con él los ancianos de
Israel.
31 Y salió de parte del Señor un viento que trajo
codornices desde el mar y las dejó caer junto al campamento, como un día de
camino de este lado, y un día de camino del otro lado, por todo alrededor del
campamento, y como dos codos (90 cm) de espesor sobre la superficie de la
tierra. 32 Y el pueblo estuvo levantado todo el día, toda la noche, y todo el
día siguiente, y recogieron las codornices, y las tendieron para sí por todos
los alrededores del campamento; el que recogió menos, recogió diez montones
(homeres: 2 toneladas). 33 Pero mientras la carne estaba aún entre sus dientes,
antes que la masticaran, la ira del Señor se encendió contra el pueblo, y el
Señor hirió al pueblo con una plaga muy mala. 34 Por eso llamaron a aquel lugar
Kibrot Hataava (Tumbas de la Codicia), porque allí sepultaron a los que habían
sido codiciosos. 35 Y de Kibrot Hataava el pueblo salió para Hazerot, y
permaneció en Hazerot.
Murmuración contra Moisés
12 Entonces Miriam y Aarón hablaron contra Moisés por
causa de la mujer Cusita con quien se había casado, pues se había casado con
una mujer Cusita; 2 y dijeron: “¿Es cierto que el Señor ha hablado sólo
mediante Moisés? ¿No ha hablado también mediante nosotros?” Y el Señor lo oyó.
3 Moisés era un hombre muy humilde, más que cualquier otro hombre sobre la
superficie de la tierra. 4 Y el Señor de repente les dijo a Moisés, a Aarón y a
Miriam: “Salgan ustedes tres a la tienda de reunión.” Y salieron los tres. 5
Entonces el Señor descendió en una columna de nube y se puso a la puerta de la
tienda; y llamó a Aarón y a Miriam. Y cuando los dos se adelantaron, 6 El dijo:
“Oigan ahora Mis palabras:
Si entre ustedes hay profeta,
Yo, el Señor, me manifestaré a él en visión.
Hablaré con él en sueños.
7 No así con Mi siervo Moisés;
En toda Mi casa él es fiel.
8 Cara a cara hablo con él,
Abiertamente y no en dichos oscuros,
Y él contempla la imagen del Señor.
¿Por qué, pues, no temieron
Hablar contra Mi siervo, contra Moisés?”
9 Y se encendió la ira del Señor contra ellos, y El se
fue. 10 Pero cuando la nube se retiró de sobre la tienda, vieron que Miriam
estaba leprosa, blanca como la nieve. Y cuando Aarón se volvió hacia Miriam,
vio que estaba leprosa. 11 Entonces Aarón dijo a Moisés: “Señor mío, te ruego
que no nos cargues este pecado, en el cual hemos obrado neciamente y con el
cual hemos pecado. 12 No permitas que ella sea como quien nace muerto, que
cuando sale del vientre de su madre su carne ya está medio consumida.” 13 Y
Moisés clamó al Señor y dijo: “Oh Dios, sánala ahora, Te ruego.” 14 Pero el
Señor le respondió a Moisés: “Si su padre le hubiera escupido a ella en el
rostro, ¿no llevaría su vergüenza por siete días? Que sea echada fuera del
campamento por siete días, y después puede ser admitida de nuevo.” 15 Miriam
fue confinada fuera del campamento por siete días y el pueblo no se puso en
marcha hasta que Miriam volvió.
16 Después el pueblo salió de Hazerot y acampó en el
desierto de Parán.
Los Doce Espías
13 Entonces el Señor habló a Moisés: 2 “Tú mismo envía
hombres a fin de que reconozcan la tierra de Canaán, que voy a dar a los
Israelitas. Enviarás un hombre de cada una de las tribus de sus padres, cada
uno de ellos jefe entre ellos.” 3 Y Moisés los envió desde el desierto de
Parán, al mandato del Señor; todos aquellos hombres eran jefes de los
Israelitas. 4 Y éstos eran sus nombres: de la tribu de Rubén, Samúa, hijo de
Zacur; 5 de la tribu de Simeón, Safat, hijo de Hori; 6 de la tribu de Judá,
Caleb, hijo de Jefone; 7 de la tribu de Isacar, Igal, hijo de José; 8 de la
tribu de Efraín, Oseas, hijo de Nun; 9 de la tribu de Benjamín, Palti, hijo de
Rafú; 10 de la tribu de Zabulón, Gadiel, hijo de Sodi; 11 de la tribu de los
hijos de José y de la tribu de Manasés, Gadi, hijo de Susi; 12 de la tribu de
Dan, Amiel, hijo de Gemali; 13 de la tribu de Aser, Setur, hijo de Micael; 14
de la tribu de Neftalí, Nahbi, hijo de Vapsi; 15 de la tribu de Gad, Geuel,
hijo de Maqui. 16 Así se llamaban los hombres a quienes Moisés envió a
reconocer la tierra; pero a Oseas, hijo de Nun, Moisés lo llamó Josué.
17 Cuando Moisés los envió a reconocer la tierra de
Canaán, les dijo: “Suban allá, al Neguev (región del sur); después suban a la
región montañosa. 18 Vean cómo es la tierra, y si la gente que habita en ella
es fuerte o débil, si son pocos o muchos; 19 y cómo es la tierra en que viven,
si es buena o mala; y cómo son las ciudades en que habitan, si son como
campamentos abiertos o con fortificaciones; 20 y cómo es el terreno, si fértil
o estéril. ¿Hay allí árboles o no? Procuren obtener algo del fruto de la tierra.”
Aquel tiempo era el tiempo de las primeras uvas maduras.
21 Entonces ellos subieron y reconocieron la tierra
desde el desierto de Zin hasta Rehob, en Lebo Hamat. 22 Y subieron por el
Neguev, y llegaron hasta Hebrón, donde estaban Ahimán, Sesai y Talmai, los
descendientes de Anac. Hebrón fue edificada siete años antes que Zoán en
Egipto.
23 Y llegaron hasta el Valle de Escol (del Racimo) y
de allí cortaron un sarmiento con un solo racimo de uvas; y lo llevaban en un
palo entre dos hombres, con algunas de las granadas y de los higos. 24 A aquel
lugar se le llamó Valle de Escol por razón del racimo que los Israelitas
cortaron allí.
25 Y volvieron de reconocer la tierra después de
cuarenta días, 26 y fueron y se presentaron a Moisés, a Aarón, y a toda la
congregación de los Israelitas en el desierto de Parán, en Cades; y les dieron
un informe a ellos y a toda la congregación, y les enseñaron el fruto de la
tierra. 27 Y le contaron a Moisés, y le dijeron: “Fuimos a la tierra adonde nos
enviaste; ciertamente mana leche y miel, y éste es el fruto de ella. 28 Sólo
que es fuerte el pueblo que habita en la tierra, y las ciudades, fortificadas y
muy grandes; y además vimos allí a los descendientes de Anac. 29 Amalec habita
en la tierra del Neguev, y los Hititas, los Jebuseos y los Amorreos habitan en
la región montañosa, y los Cananeos habitan junto al mar y a la ribera del
Jordán.”
30 Entonces Caleb calmó al pueblo delante de Moisés, y
dijo: “Debemos ciertamente subir y tomar posesión de ella, porque sin duda la
conquistaremos.” 31 Pero los hombres que habían subido con él dijeron: “No
podemos subir contra ese pueblo, porque es más fuerte que nosotros.” 32 Y
dieron un mal informe a los Israelitas de la tierra que habían reconocido,
diciendo: “La tierra por la que hemos ido para reconocerla es una tierra que
devora a sus habitantes, y toda la gente que vimos en ella son hombres de gran
estatura. 33 Vimos allí también a los gigantes (los hijos de Anac son parte de
la raza de los gigantes); y a nosotros nos pareció que éramos como langostas; y
así parecíamos ante sus ojos.”
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
©
2005 by The Lockman Foundation, La Habra, California
Marcos
14:22-52 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
Institución de la Cena del Señor
22 Mientras comían, tomó pan, y habiéndolo bendecido
lo partió, se lo dio a ellos, y dijo: “Tomen, esto es Mi cuerpo.” 23 Y tomando
una copa, después de dar gracias, se la dio a ellos, y todos bebieron de ella.
24 Y les dijo: “Esto es Mi sangre del nuevo[a] pacto, que es derramada por
muchos. 25 En verdad les digo, que ya no beberé más del fruto de la vid hasta
aquel día cuando lo beba nuevo en el reino de Dios.”
26 Después de cantar un himno, salieron para el Monte
de los Olivos.
Jesús Predice la Negación de Pedro
27 Jesús les dijo: “Todos ustedes se apartarán[b],
porque escrito está: ‘Herire al pastor, y las ovejas se dispersaran.’ 28 Pero
después de que Yo haya resucitado, iré delante de ustedes a Galilea.” 29
“Aunque todos se aparten[c], yo, sin embargo, no lo haré,” Le dijo Pedro.
30 Jesús le contestó: “En verdad te digo que hoy, esta
misma noche, antes que el gallo cante dos veces, Me negarás tres veces.” 31
Pero Pedro con insistencia repetía: “Aunque tenga[d] que morir junto a Ti, no
Te negaré.” Y todos decían también lo mismo.
Jesús en Getsemaní
32 Llegaron a un lugar que se llama Getsemaní, y Jesús
dijo a Sus discípulos: “Siéntense aquí hasta que Yo haya orado.” 33 Tomó con El
a Pedro, a Jacobo (Santiago) y a Juan, y comenzó a afligirse y a angustiarse
mucho. 34 “Mi alma está muy afligida, hasta el punto de la muerte,” les dijo;
“quédense aquí y velen.”
35 Adelantándose un poco, se postró[e] en tierra y
oraba que si fuera posible, pasara de El aquella[f] hora. 36 Y decía: “¡Abba,
Padre! Para Ti todas las cosas son posibles; aparta de Mí esta copa, pero no
sea lo que Yo quiero, sino lo que Tú quieras.” 37 Entonces Jesús vino y los
halló durmiendo, y dijo a Pedro: “Simón, ¿duermes? ¿No pudiste velar ni por una
hora? 38 Velen y oren para que no entren en tentación; el espíritu está
dispuesto, pero la carne es débil.”
39 El se fue otra vez y oró, diciendo las mismas
palabras[g]. 40 Y vino Jesús de nuevo y los halló durmiendo, porque sus ojos
estaban muy cargados de sueño; y no sabían qué responder. 41 Vino por tercera
vez, y les dijo: “¿Todavía están[h] durmiendo y descansando? Basta ya; ha
llegado la hora; miren, el Hijo del Hombre es entregado en manos de los
pecadores. 42 Levántense, vámonos; ya está cerca el que Me entrega.”
Arresto de Jesús
43 En ese momento[i], mientras Jesús estaba todavía
hablando, llegó Judas, uno de los doce discípulos, acompañado de[j] una
multitud con espadas y palos, de parte de los principales sacerdotes, de los
escribas y de los ancianos. 44 Y el que Lo entregaba les había dado una señal,
diciendo: “Al que yo bese, Ese es; Lo prenden y se Lo llevan con seguridad[k].”
45 Cuando llegó Judas, inmediatamente se acercó a
Jesús y le dijo: “¡Rabí (Maestro)!” Y Lo besó. 46 Entonces ellos echaron mano a
Jesús y Lo prendieron. 47 Pero uno de los que estaban allí, sacando la espada,
hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó[l] la oreja.
48 Y dirigiéndose[m] Jesús a ellos, les dijo: “¿Como
contra un ladrón han salido con espadas y palos para asegurarse que Me
arrestaban? 49 Cada día estaba con ustedes en el templo enseñando, y no Me
prendieron; pero esto ha sucedido para[n] que se cumplan las Escrituras.” 50 Y
abandonando a Jesús, todos huyeron.
Un Joven Sigue a Jesús
51 Cierto joven seguía a Jesús, vestido sólo con una
sábana sobre su cuerpo desnudo; y lo prendieron; 52 pero él, dejando la sábana,
escapó desnudo.
Footnotes:
Marcos 14:24 Algunos mss. antiguos omiten, nuevo
Marcos 14:27 O escandalizarán, o caerán
Marcos 14:29 O escandalicen, o caigan
Marcos 14:31 Lit Y si tengo
Marcos 14:35 Lit caía
Marcos 14:35 Lit la
Marcos 14:39 Lit la misma palabra
Marcos 14:41 O siguen
Marcos 14:43 O Inmediatamente
Marcos 14:43 Lit y con él
Marcos 14:44 O bajo guardia
Marcos 14:47 Lit le quitó
Marcos 14:48 Lit respondiendo
Marcos 14:49 O posiblemente, pero dejen
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
©
2005 by The Lockman Foundation, La Habra, California
Salmos
52 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
Lo Vano de la Maldad que Se Gloría
Para el director del coro. Masquil de David, cuando
fue Doeg el Edomita e informó a Saúl, diciéndole: “David está en casa de
Ahimelec.”
52 ¿Por qué te glorías del mal, oh poderoso?
La misericordia de Dios es constante.
2 Tu lengua trama destrucción
Como afilada navaja, oh artífice de engaño.
3 Amas el mal más que el bien,
La mentira más que decir lo que es justo. (Selah)
4 Amas toda palabra destructora,
Oh lengua de engaño.
5 Pero Dios te destruirá para siempre;
Te arrebatará y te arrancará de tu tienda,
Y te desarraigará de la tierra de los vivientes.
(Selah)
6 Los justos verán esto y temerán,
Y se reirán de él, diciendo:
7 “Ese es el hombre que no quiso hacer de Dios su
refugio,
Sino que confió en la abundancia de sus riquezas
Y se hizo fuerte en sus malos deseos.”
8 Pero yo soy como olivo verde en la casa de Dios;
En la misericordia de Dios confío eternamente y para
siempre.
9 Te daré gracias para siempre por lo que has hecho,
Y esperaré en Tu nombre, porque es bueno delante de
Tus santos.
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
©
2005 by The Lockman Foundation, La Habra, California
Proverbios
11:1-3 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
11 La balanza falsa es abominación al Señor,
Pero el peso cabal es Su deleite.
2 Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra;
Pero la sabiduría está con los humildes.
3 La integridad de los rectos los guiará,
Pero la perversidad de los traidores los destruirá.
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
©
2005 by The Lockman Foundation, La Habra, California
No comments:
Post a Comment