2 Samuel 4:1-6:23; Juan 13:31-14:14; Salmos 119:17-32; Proverbios 15:31-32 (La Biblia de las Américas (LBLA))
2 Samuel 4-6 La Biblia de las Américas
(LBLA)
Duelo
de David por la muerte de Is-boset
4
Cuando oyó Is-boset, hijo[a] de Saúl, que Abner había sido muerto en Hebrón, se
amedrentó[b], y todo Israel se turbó. 2 Y el hijo de Saúl tenía dos hombres que
eran jefes de bandas: el nombre de uno era Baana, y el del otro Recab, hijos de
Rimón beerotita, de los hijos de Benjamín (porque Beerot es también considerado
parte de Benjamín, 3 pues los beerotitas habían huido a Gitaim y han sido
forasteros allí hasta el día de hoy).
4
Y Jonatán, hijo de Saúl, tenía un hijo lisiado de los pies. Este tenía cinco
años cuando de Jezreel llegaron las noticias de la muerte de Saúl y Jonatán, y
su nodriza lo tomó y huyó, pero sucedió que en su prisa por huir, él se cayó y
quedó cojo. Su nombre era Mefiboset[c].
5
Y los hijos de Rimón beerotita, Recab y Baana, fueron y entraron en la casa de
Is-boset en el calor del día, mientras él dormía la siesta. 6 Y[d] llegaron
hasta la mitad de la casa como si fueran a buscar trigo[e], y lo hirieron en el
vientre; y Recab y su hermano Baana escaparon. 7 Habían entrado en la casa
mientras Is-boset[f] estaba acostado en su lecho, en su alcoba; lo hirieron y
lo mataron, y le cortaron la cabeza. Y tomando su cabeza, anduvieron toda la
noche camino del Arabá. 8 Trajeron la cabeza de Is-boset a David en Hebrón, y
dijeron al rey: He aquí la cabeza de Is-boset, hijo de tu enemigo Saúl, el que
buscaba tu vida; de esta manera el Señor ha concedido hoy a mi señor el rey
venganza sobre Saúl y sus descendientes[g].
9
Respondiendo David a Recab y a su hermano Baana, hijos de Rimón beerotita, les
dijo: Vive el Señor que ha redimido mi vida de toda angustia, 10 que cuando uno
me avisó, diciendo: «He aquí, Saúl ha muerto», pensando que me traía buenas
noticias[h], yo lo prendí y lo maté en Siclag, lo cual fue el pago que le di
por sus noticias. 11 ¿Cuánto más, cuando hombres malvados han matado a un
hombre justo en su propia casa y sobre su cama, no demandaré ahora su sangre de
vuestras manos, borrándoos[i] de la tierra? 12 Y David dio una orden a los
jóvenes, y ellos los mataron y les cortaron las manos y los pies y los colgaron
junto al estanque en Hebrón. Pero tomaron la cabeza de Is-boset y la sepultaron
en el sepulcro de Abner, en Hebrón.
David,
rey de Israel y de Judá
5
Entonces todas las tribus de Israel fueron a David, en Hebrón, y dijeron[j]:
Henos aquí, hueso tuyo y carne tuya somos. 2 Ya de antes, cuando Saúl aún era
rey sobre nosotros, eras tú el que guiabas a Israel en sus salidas y entradas.
Y el Señor te dijo: «Tú pastorearás a mi pueblo Israel, y serás príncipe sobre
Israel». 3 Vinieron, pues, todos los ancianos de Israel al rey en Hebrón, y el
rey David hizo un pacto con ellos en Hebrón delante del Señor; luego ungieron a
David como rey sobre Israel. 4 Treinta años tenía David cuando llegó a ser rey,
y reinó cuarenta años. 5 En Hebrón reinó sobre Judá siete años y seis meses, y
en Jerusalén reinó treinta y tres años sobre todo Israel y Judá.
6
Y el rey y sus hombres fueron a Jerusalén contra los jebuseos, los habitantes
de la tierra, y estos dijeron a David[k]: No entrarás aquí; aun los ciegos y los
cojos te rechazarán; pues pensaban[l]: David no puede entrar aquí. 7 No
obstante, David conquistó la fortaleza de Sión, es decir, la ciudad de David. 8
Y dijo David aquel día: Todo el que quiera herir a los jebuseos, que suba por
el túnel del agua y llegue a los cojos y a los ciegos, a los cuales el alma de
David aborrece. Por eso se dice: Ni los ciegos ni los cojos entrarán en la
casa. 9 David habitó en la fortaleza, y la llamó la ciudad de David. Y
edificó[m] David la muralla en derredor desde el Milo[n] hacia adentro. 10
David se engrandecía cada vez más, porque el Señor, Dios de los ejércitos,
estaba con él.
11
Y envió Hiram, rey de Tiro, mensajeros a David con madera de cedros,
carpinteros y canteros, y construyeron una casa para David. 12 Y comprendió
David que el Señor lo había confirmado por rey sobre Israel, y que había
exaltado su reino por amor a su pueblo Israel.
13
Después que vino de Hebrón, David tomó más concubinas y mujeres de Jerusalén; y
le nacieron a David más hijos e hijas. 14 Estos son los nombres de los que le
nacieron en Jerusalén: Samúa, Sobab, Natán, Salomón, 15 Ibhar, Elisúa, Nefeg,
Jafía, 16 Elisama, Eliada y Elifelet.
17
Al oír los filisteos que David había sido ungido rey sobre Israel, todos los
filisteos subieron a buscar a David; y cuando David se enteró, bajó a la
fortaleza; 18 y los filisteos llegaron y se esparcieron por el valle de Refaim.
19 David consultó al Señor, diciendo: ¿Subiré contra los filisteos? ¿Los
entregarás en mi mano? Y el Señor dijo a David: Sube, porque ciertamente
entregaré a los filisteos en tu mano. 20 David fue a Baal-perazim, y allí los
derrotó[o]; y dijo: El Señor ha abierto brecha entre mis enemigos delante de
mí, como brecha de aguas. Por eso llamó a aquel lugar Baal-perazim[p]. 21 Y
ellos abandonaron allí sus ídolos, y David y sus hombres se los llevaron.
22
Después los filisteos subieron de nuevo, y se esparcieron por el valle de
Refaim. 23 Cuando David consultó al Señor, Él dijo: No subas directamente; da
un rodeo por detrás de ellos y sal a ellos frente a las balsameras. 24 Y[q]
cuando oigas el sonido de marcha en las copas de las balsameras, entonces
actuarás rápidamente, porque entonces el Señor habrá salido delante de ti para
herir al ejército de los filisteos. 25 David lo hizo así, tal como el Señor le
había ordenado, e hirió a los filisteos desde Geba[r] hasta[s] Gezer.
David
lleva el arca a Jerusalén
6
Volvió David a reunir a todos los hombres escogidos de Israel, treinta mil. 2 Y
David se levantó y fue con todo el pueblo que estaba con él a[t] Baala[u] de
Judá, para hacer subir desde allí el arca de Dios, la cual es llamada por el
Nombre, el nombre del Señor de los ejércitos, que está[v] sobre los querubines.
3 Pusieron[w] el arca de Dios sobre un carro nuevo, para que la pudieran llevar
de la casa de Abinadab que estaba en la colina. Uza y Ahío, hijos de Abinadab,
guiaban el carro nuevo. 4 Y lo llevaron con el arca de Dios de la casa de
Abinadab que estaba en la colina, y Ahío iba delante del arca. 5 David y toda
la casa de Israel se regocijaban delante del Señor con toda clase de
instrumentos hechos de madera de abeto[x], y con liras, arpas, panderos,
castañuelas y címbalos.
6
Pero cuando llegaron a la era de Nacón, Uza extendió la mano hacia el arca de
Dios, y la sostuvo porque los bueyes casi la volcaron. 7 Y se encendió la ira
del Señor contra Uza, y Dios lo hirió allí por su[y] irreverencia; y allí murió
junto al arca de Dios. 8 Entonces David se enojó porque el Señor había
estallado en ira[z] contra Uza, y llamó aquel lugar Pérez-uza[aa] hasta el día
de hoy. 9 David tuvo temor del Señor aquel día, y dijo: ¿Cómo podrá venir a mí
el arca del Señor? 10 Y David no quiso trasladar el arca del Señor con él a la
ciudad de David, sino que[ab] la hizo llevar[ac] a la casa de Obed-edom geteo.
11 Por tres meses permaneció el arca del Señor en la casa de Obed-edom geteo; y
bendijo el Señor a Obed-edom y a toda su casa.
12
Y se dio aviso al rey David, diciéndole: El Señor ha bendecido la casa de
Obed-edom y todo lo que le pertenece a causa del arca de Dios. Entonces David
fue, y con alegría hizo subir el arca de Dios de la casa de Obed-edom a la
ciudad de David. 13 Y sucedió que cuando los portadores del arca del Señor
habían andado seis pasos, él sacrificó un buey y un carnero cebado. 14 David
danzaba con toda su fuerza delante del Señor, y estaba vestido[ad] con un efod
de lino. 15 David y toda la casa de Israel hacían subir el arca del Señor con
aclamación y sonido de trompeta. 16 Sucedió que cuando el arca del Señor
entraba a la ciudad de David, Mical, hija de Saúl, miró desde la ventana y vio
al rey David saltando y danzando delante del Señor, y lo menospreció en su
corazón. 17 Metieron el arca del Señor y la colocaron en su lugar dentro de la
tienda que David había levantado para ella, y David ofreció holocaustos y
ofrendas de paz delante del Señor. 18 Cuando David terminó de ofrecer el
holocausto y las ofrendas de paz, bendijo al pueblo en el nombre del Señor de
los ejércitos. 19 Después repartió a todo el pueblo, a toda la multitud de Israel,
tanto a hombres como a mujeres, una torta de pan, una de dátiles y una de pasas
a cada uno. Entonces todo el pueblo se fue, cada uno a su casa.
20
Pero al regresar David para bendecir su casa, Mical, hija de Saúl, salió al
encuentro de David, y le dijo: ¡Cómo se ha distinguido hoy el rey de Israel! Se
descubrió hoy ante los ojos de las criadas de sus siervos, como se descubriría
sin decoro un insensato. 21 Y David dijo a Mical: Eso fue delante del Señor que
me escogió en preferencia a tu padre y a toda su casa para constituirme por
príncipe sobre el pueblo del Señor, sobre Israel. Por tanto, lo celebraré
delante del Señor. 22 Y aún seré menos estimado que esto, y seré humillado ante
mis propios ojos, pero con las criadas de quienes has hablado, ante ellas seré
honrado. 23 Y Mical, hija de Saúl, no tuvo hijos hasta el día de su muerte.
Footnotes:
2 Samuel 4:1 Así en algunos mss.; en el
T.M., oyó el hijo
2 Samuel 4:1 Lit., cayeron sus manos
2 Samuel 4:4 En 1 Crón. 8:34 y 9:40,
Merib-baal
2 Samuel 4:6 Lit., Y aquí
2 Samuel 4:6 Lit., recogedores de trigo
2 Samuel 4:7 Lit., él
2 Samuel 4:8 Lit., su simiente
2 Samuel 4:10 Lit., y él era portador de
buenas noticias ante sus propios ojos
2 Samuel 4:11 Lit., quemándoos
2 Samuel 5:1 Lit., dijeron, diciendo
2 Samuel 5:6 Lit., a David, diciendo
2 Samuel 5:6 Lit., diciendo
2 Samuel 5:9 O, fortificó
2 Samuel 5:9 I.e., la ciudadela
2 Samuel 5:20 Lit., David los hirió
2 Samuel 5:20 I.e., el señor que abre brecha
2 Samuel 5:24 Lit., Y será que
2 Samuel 5:25 En 1 Crón. 14:16, Gabaón
2 Samuel 5:25 Lit., hasta tu llegada a
2 Samuel 6:2 Lit., desde
2 Samuel 6:2 I.e., Quiriat-jearim
2 Samuel 6:2 Lit., está sentado
2 Samuel 6:3 Lit., E hicieron andar
2 Samuel 6:5 O, ciprés
2 Samuel 6:7 Lit., la
2 Samuel 6:8 Lit., el Señor irrumpió por
una brecha
2 Samuel 6:8 I.e., la brecha de Uza
2 Samuel 6:10 Lit., y David
2 Samuel 6:10 Lit., desviar
2
Samuel 6:14 Lit., y David estaba ceñido
La
Biblia de las Américas (LBLA)
Copyright
© 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation
Juan 13:31-14:14 La Biblia de las
Américas (LBLA)
Un
mandamiento nuevo
31
Entonces, cuando salió, Jesús dijo*: Ahora es[a] glorificado el Hijo del
Hombre, y Dios es glorificado en Él. 32 Si Dios es glorificado en Él[b], Dios
también le glorificará en sí mismo, y le glorificará enseguida. 33 Hijitos,
estaré con vosotros un poco más de tiempo. Me buscaréis, y como dije a los judíos,
ahora también os digo a vosotros: adonde yo voy, vosotros no podéis ir. 34 Un
mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que como yo os he
amado, así también os améis los unos a los otros. 35 En esto conocerán todos
que sois mis discípulos, si os tenéis amor los unos a los otros.
Jesús
predice la negación de Pedro
36
Simón Pedro le dijo*: Señor, ¿adónde vas? Jesús respondió: Adonde yo voy, tú no
me puedes seguir ahora, pero me seguirás después. 37 Pedro le dijo*: Señor,
¿por qué no te puedo seguir ahora mismo? ¡Yo daré mi vida por ti! 38 Jesús le
respondió*: ¿Tu vida darás por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el
gallo sin que antes me hayas negado tres veces.
Palabras
de consuelo y dirección
14
No se turbe vuestro corazón; creed[c] en Dios, creed también en mí. 2 En la
casa de mi Padre hay muchas moradas; si no fuera así, os lo hubiera dicho;
porque voy a preparar un lugar para vosotros. 3 Y si me voy y preparo un lugar
para vosotros, vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo estoy,
allí estéis también vosotros. 4 Y conocéis el camino adonde voy[d]. 5 Tomás le
dijo*: Señor, si no sabemos adónde vas, ¿cómo vamos a[e] conocer el camino? 6
Jesús le dijo*: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre
sino por mí. 7 Si me hubierais conocido, también hubierais conocido a mi Padre;
desde ahora le conocéis y le habéis visto. 8 Felipe le dijo*: Señor, muéstranos
al Padre, y nos basta. 9 Jesús le dijo*: ¿Tanto tiempo he estado con vosotros,
y todavía no me conoces, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre;
¿cómo dices tú: «Muéstranos al Padre»? 10 ¿No crees que yo estoy en el Padre, y
el Padre en mí? Las palabras que yo os digo, no las hablo por mi propia cuenta,
sino que el Padre que mora en mí es el que hace las[f] obras. 11 Creedme que yo
estoy en el Padre, y el Padre en mí; y si no, creed por las obras mismas. 12 En
verdad, en verdad os digo: el que cree en mí, las obras que yo hago, él las
hará también; y aun mayores que estas hará, porque yo voy al Padre. 13 Y todo
lo que pidáis en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el
Hijo. 14 Si me pedís algo en mi nombre, yo lo haré.
Footnotes:
Juan 13:31 O, fue
Juan 13:32 Algunos mss. antiguos no
incluyen esta frase
Juan 14:1 O, creéis
Juan 14:4 Muchos mss. dicen: Y adonde yo
voy lo sabéis, y el camino lo conocéis
Juan 14:5 Algunoa mss. antiguos dicen:
¿cómo podemos
Juan 14:10 Lit., sus
La
Biblia de las Américas (LBLA)
Copyright
© 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation
Salmos 119:17-32 La Biblia de las
Américas (LBLA)
Guímel.
17
Favorece
a tu siervo,
para
que viva y guarde tu palabra.
18
Abre
mis ojos, para que vea
las
maravillas de tu ley.
19
Peregrino
soy en la tierra,
no
escondas de mí tus mandamientos.
20
Quebrantada
está mi alma anhelando
tus
ordenanzas en todo tiempo.
21
Tú
reprendes a los soberbios, los malditos,
que[a]
se desvían de tus mandamientos.
22
Quita
de mí el oprobio y el desprecio,
porque
yo guardo tus testimonios.
23
Aunque
los príncipes se sienten y hablen contra mí,
tu
siervo medita en tus estatutos.
24
También
tus testimonios son mi deleite;
ellos
son mis consejeros[b].
Dálet.
25
Postrada
está mi alma en el[c] polvo;
vivifícame
conforme a tu palabra.
26
De
mis caminos te conté, y tú me has respondido;
enséñame
tus estatutos.
27
Hazme
entender el camino de tus preceptos,
y
meditaré en tus maravillas.
28
De
tristeza llora[d] mi alma;
fortaléceme
conforme a tu palabra.
29
Quita
de mí el camino de la mentira,
y
en tu bondad concédeme tu ley.
30
He
escogido el camino de la verdad[e];
he
puesto tus ordenanzas delante de mí.
31
Me
apego a tus testimonios;
Señor,
no me avergüences.
32
Por
el camino de tus mandamientos correré,
porque
tú ensancharás mi corazón.
Footnotes:
Salmos 119:21 O, malditos son los que
Salmos 119:24 Lit., los hombres de mi
consejo
Salmos 119:25 Lit., Pegada...al
Salmos 119:28 Lit., gotea
Salmos 119:30 O, fidelidad
La
Biblia de las Américas (LBLA)
Copyright
© 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation
Proverbios 15:31-32 La Biblia de las
Américas (LBLA)
31
El
oído que escucha las reprensiones de la vida,
morará
entre los sabios.
32
El
que tiene en poco la disciplina[a] se desprecia a sí mismo,
mas
el que escucha las reprensiones adquiere entendimiento[b].
Footnotes:
Proverbios 15:32 O, instrucción
Proverbios 15:32 Lit., corazón
La
Biblia de las Américas (LBLA)
Copyright
© 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation
No comments:
Post a Comment